Seguro que Freixenet pensó esto cuando se planteó hacer algo diferente con su comunicación navideña.
Ahora es una marca rejuvenecida, es otra cosica, eh?
Ah! ¡que no has visto el corto? pues míralo.
Una maravilla. Es muy original. Es tan raro que no lo he visto hasta ahora después de perseguirlo durante todo el día porque pensaba que lo que habían colgado era el making of! Pues eso, al final, lo he empezado a ver... era el corto. Buenísimo. Un guión buenísimo.
Un guión de Hitchcock según Scorsese como Hitchcock lo hubiese hecho. Y lo ha clavado!
Y qué hay de malo en todo esto? Pues como muchas veces, el cliente.
Estaba enganchado a un pedazo de corto. Me sentía más freixetenero que nunca. Me coloqué el abrigo para ir a comprar la primera botella de estas fiestas (Freixenet, por supuesto). Y calentito calentito vi cómo terminaba el corto. Por supuesto, inmediatamente me quité el abrigo y lo comenté con mis compañeros.
– Oye, está bonito el corto, no?
– Pues sí.– Me contestó un compañero.
– Sobra un poco la botella, no?
– Sí, un poco a capón. Pero bueno.
PUES ESO.
Gran idea. Lástima que sea para una marca.
martes, 27 de noviembre de 2007
Estoy muerta. Estoy viva.
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3 comentarios:
El corto está bien. Pero la botella hacía más papel en mi nevera. Lo jode todo. Aunque tampoco es que la web ayude demasiado.
Moraleja: Scorsese y Hitchcock molan y de Freixenet solo molan las burbujitas.
¿Os imagináis que abre la caja y aparece un tetrabrick de Don Simón?
El spot-corto estaría a la altura del gorila de Cadbury jj...
Me parece que te has confundido.
Prueba en el izquierda.
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